Rojos: bares.

Ámbar: cafeterías, Ujados, 

Verdes: casa, Auditorio Nacional, huerto, vía ciclista.

La única forma que se me ocurre de evitar los lugares rojos, el bar en mi caso, es no yendo.  En mis paseos matinales evitar pasar por la puerta de los bares que frecuento.

La forma de protegerme en los lugares ámbar es pedir una tónica y, si me preguntan la razón de no pedir alcohol responder que es por motivos de salud, que el alcoho me sienta mal.

Para estar más en los lugares verdes me he comprado el abono del Auditorio, voy los sábados por la mañana al huerto de mi hermano, paso más tiempo en casa y me doy paseos diarios siguiendo la vía ciclista.