Una situación recurrente son las cenas de Navidad de la empresa. Además en esas ocasiones hay una permisividad con el alcohol que no está presente en las relaciones laborales del día a día, casi todos mis compañeros terminan con alguna copa de más, aunque no beban habitualmente.

-“¡Qué bien que has venido, que no todo en la vida es trabajar! Hoy, a divertirnos, y si hace falta, nos desmadramos, ¿Qué vas a beber?”

-“Una tónica”

-“¡No me jodas!, ¿qué mosca te ha picado? ¿Por qué no te tomas algo en condiciones?”

-“Porque llevo bebiendo mucho tiempo y me sienta fatal, prefiero divertirme sin fastidiar más mi salud.”