Viktor Frankl dijo: «Entre estímulo y respuesta hay un espacio. En ese espacio está nuestro poder para elegir nuestra respuesta. En nuestra respuesta radica nuestro crecimiento y nuestra libertad».

La adicción te ha instalado en la inmediatez, todo lo quieres en el momento; eso es exactamente lo que te quita la libertad y te mantiene estancado en un programa, tus reacciones son simples estímulos que se generan dependiendo de tu programación.

Te invitamos a que, a través de la terapia de grupo on-line de MMS, aprendas a bajar el ritmo frenético al que te has habituado y descubras por qué consumes mediante la palabra. Verbalizar tus emociones y escuchar a los compañeros que están en tu mismo proceso de recuperación, te hará comprender que estás proyectando el mundo para obtener ideas que te den la razón; pero tus creencias no son del todo ciertas y cuando lo veas y consigas manejar tus emociones, crecerás y podrás elegir tus respuestas desde la libertad.

La recuperación es posible

Beber es huir de la realidad y si huyes de la realidad es porque crees que la fantasía es mejor, sin embargo, si miras bien verás que la realidad es más rica que cualquier fantasía. Lo que ocurre es que la vida es movimiento continuado y la mente quiere que nada se mueva para sentirse segura. Hay que aprender a sentirse seguro con el movimiento, a disfrutar del camino y a poner interés en cada paisaje que se asome a nuestra ventanilla. 

La recuperación es una carrera de fondo, no requiere velocidad, requiere constancia. Viajas a tu recuperación, tu compromiso es la abstinencia y tu trabajo asistir a las sesiones puntualmente; sesión tras sesión aprenderás a pasar por tu alma un rastrillo que desenrede sus nudos y, poco a poco, lograrás separar el amor de la destrucción, volverás a quererte y dejarás de autolesionarte.  No es fácil, pero si sigues las pautas que te ofreceremos, lo conseguirás. San Francisco de Asís decía: «Empieza haciendo lo necesario, después lo posible, y de pronto te encontrarás haciendo lo imposible». 

El futuro es una elección

Hazte preguntas, las preguntas abren espacios y caminos que parecían no existir. ¿Quién es el responsable de tu futuro? ¿Qué harías si pudieras elegir el futuro? Tu desconfianza hacia el futuro es lo que te dificulta soltar el pasado, es decir, eres libre pero vives esclavo de tu pasado. Mediante la terapia te ayudaremos a encontrar las respuestas y a cambiar de conducta.

Ocurre que la adicción te mantiene en la incertidumbre que es el peor de los estados, pero cuando dejas de consumir tomas el mando de la acción y decides y eliges y te conviertes en lo que quieres convertirte.  Como dijo Heráclito: «Todos los días, lo que eliges, lo que piensas y lo que haces, te convierten en lo que eres».

Tu futuro depende de tu presente. Ábrete humildemente a las posibilidades de tu existencia y ten fe ciega en tu capacidad de triunfo y también en el ardor con que lo deseas. 

Cada pequeño cambio cuenta

Diariamente tendrás que planificar cómo afrontar la vida y los posibles peligros de recaída; cada pequeño cambio hará más sólida la nueva identidad que estás forjando. Lo que se cocina lentamente tiene mejor sabor que las cosas preparadas rápidamente, lo mismo pasa con el proceso de la recuperación, hay que ir poco a poco, con paso firme y confianza en que se conseguirá. 

Tu ego pedirá consumir y sabes por experiencia dónde te llevaría, pero pondremos en tu mano las herramientas suficientes para templar tus nervios y ganarle el pulso. El golfista estadounidense Bruce Crampton dice que «la vida es el acuerdo al que llegamos entre lo que el ego desea hacer, lo que la experiencia nos aconseja y lo que los nervios nos permiten». 

Manteniendo tu compromiso de abstinencia, asistiendo a las sesiones de terapia y con entrenamiento diario, fortalecerás tus nervios de tal manera que, un buen día, tomarán el mando y dejarán la adicción en el pasado, un lugar al que ya no querrás volver porque así lo has decidido desde la libertad.